En octubre de 2024, Valencia enfrentó graves inundaciones provocadas por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), evidenciando una vez más la vulnerabilidad de nuestras ciudades frente a fenómenos naturales extremos. Ante estos desafíos, la integración de tecnologías como Building Information Modeling (BIM) y los Sistemas de Información Geográfica (GIS) emerge como una solución crucial para mitigar los impactos de futuros desastres naturales.

Fuente: EFE | Miguel Ángel Polo
¿Cómo se complementan BIM y GIS?
Las inundaciones urbanas son un problema complejo que combina factores como el cambio climático, la urbanización acelerada y la insuficiencia en infraestructuras de drenaje. Valencia, como muchas otras ciudades, requiere una planificación y gestión más eficiente para prevenir y responder a este tipo de emergencias. Aquí es donde las herramientas tecnológicas como BIM y GIS pueden marcar la diferencia.
- GIS: Análisis espacial y predicción: Los GIS permiten analizar y modelar grandes cantidades de datos geoespaciales, lo que resulta esencial para identificar zonas de riesgo y planificar medidas preventivas. Al incorporar información topográfica, hidrológica y meteorológica, los GIS ayudan a prever inundaciones y diseñar estrategias para minimizar su impacto.
- BIM: Detalle y simulación a nivel de infraestructura: BIM proporciona modelos digitales detallados de infraestructuras urbanas, como sistemas de drenaje, carreteras y edificios. Esta metodología permite simular el comportamiento de estas estructuras ante diferentes escenarios de inundación, optimizando su diseño para resistir eventos climáticos extremos.
La integración de GIS y BIM ofrece una visión integral: los GIS proporcionan el contexto geoespacial mientras que BIM detalla las características y comportamientos de las infraestructuras dentro de ese entorno. Juntas, estas tecnologías permiten una planificación más informada y proactiva.
Aplicaciones prácticas para prevenir inundaciones
- Planificación y diseño de infraestructuras de drenaje: GIS identifica las áreas propensas a inundaciones, y BIM permite diseñar sistemas de drenaje adaptados a estas condiciones específicas, asegurando su eficacia.
- Simulación de escenarios: Con BIM y GIS, es posible realizar simulaciones de eventos climáticos extremos para evaluar la respuesta de las infraestructuras y tomar medidas correctivas antes de que ocurran los desastres.
- Monitoreo en tiempo real: Los GIS integrados con sensores IoT permiten monitorear variables como el nivel de agua y las precipitaciones en tiempo real. BIM, por su parte, puede incorporar estos datos para ajustar la operación de infraestructuras críticas.
Ciudades como Copenhague y Singapur ya están utilizando la combinación de BIM y GIS para gestionar riesgos climáticos y desarrollar infraestructuras resilientes. En el caso de Valencia, esta tecnología podría implementarse para rediseñar el sistema de drenaje, planificar áreas de retención de agua y crear corredores verdes que actúen como amortiguadores naturales.La colaboración entre BIM y GIS no solo es una herramienta eficaz para prevenir desastres naturales como las inundaciones, sino también una inversión en la resiliencia y sostenibilidad de nuestras ciudades. En Fisotec, estamos comprometidos con la aplicación de estas tecnologías para garantizar entornos urbanos más seguros y preparados ante los desafíos del futuro.